Quiero dejar clara una cosa, y lo escribo en mayúsculas para que dé la sensación de que lo grito a los cuatro vientos: HAY QUE APLAUDIR EN EL CINE. Con los años me he dado cuenta de que ya no se aplaude al acabar una película, y que las luces se encienden casi al segundo de haber aparecido el nombre del director en la pantalla. La gente recoge sus cosas y se va, como si ellos, todos desconocidos, no acabaran de compartir un par de horas riendo, llorando y emocionándose juntos. Es una pena.
Y digo esto precisamente porque hace un par de semanas ocurrió algo maravilloso. Como cada jueves, me acerqué al cine de mi universidad para ver qué película preestrenaban, y cuando leí la sinopsis de Pride supe que tenía que quedarme. Lo hice, y cómo me alegro. Reí, lloré, me emocioné y me puse de pie para aplaudir cuando aparecieron los créditos; lo bonito fue que no fui la única, y toda la sala sonreía emocionada mientras aplaudía mirando la pantalla. La magia del cine, ya veis.
En el verano de 1984, siendo primera ministra Margaret Thatcher, el Sindicato Nacional de Mineros (NUM) convoca una huelga. Durante la manifestación del Orgullo Gay en Londres, un grupo de lesbianas y gays se dedica a recaudar fondos para ayudar a las familias de los trabajadores, pero el sindicato no acepta el dinero. El grupo decide entonces ponerse en contacto directo con los mineros y viaja hasta un pueblecito de Gales a entregar el dinero en mano. Empieza así la curiosa historia de dos comunidades totalmente diferentes que se unen por una causa común.
El cine francés tiene ese nosequé que hace que las películas tengan algo especial que las diferencia de las demás. El cine británico, en cambio, puede estar orgulloso de tener algunas las mejores comedias que se han filmado. Pride es un buen ejemplo: se trata de comedia sin humor fácil, con personajes basados en personas reales, lo que los hace cercanos. La historia por sí sola ya es interesante, pero la manera de llevarla a la pantalla —reparto intachable, banda sonora maravillosa y un guion cuyo ritmo nos lleva a volandas durante las dos horas que dura la película— es la clave de todo y lo que la hace inolvidable.
Los momentos que provocan risas y sonrisas —la genial escena de baile de Jonathan, tan en la estela de Full Monty— se ven contrarrestados por escenas llenas de emoción que lograron hacer que pusiera todos mis esfuerzos en no dejar caer las lágrimas, como el momento en el que los habitantes del pueblo, junto a LGSM (Lesbians and Gays Support the Miners), entonan Bread and Roses. La piel de gallina y el corazón calentito.
Se ha estrenado en muy pocos cines, y es una pena que habiendo películas tan maravillosas como Pride se prefiera ir a lo seguro y seguir llenando las salas con películas vacías. Si queréis pasar dos horas delante de una pantalla y que al salir de la sala os sintáis más ligeros al saber que lo que cuenta la película, algo tan genial e importante, sucedió de verdad, Pride es vuestra película. No me cansaré de recomendarla.
Trailer en inglés
Trailer en español
No conocía esta película!!! pero tiene pinta de estar bien
ResponderEliminarsaludos
Mágica y maravillosa. LA ADORÉ. Mucho.
ResponderEliminarEs que... este encuentro entre activistas gays y mineros en la Inglaterra de Margaret Thatcher sólo podía llevar a un único destino: PURA EMOCIÓN.
Y, por favor... Imelda Staunton y Bill Nighy, ¡brillante reparto!
La escena de ellos dos haciendo sándwiches > todo.
EliminarAy. Yo sí que te comento en la entrada, va.
ResponderEliminarLeí tu post hace unos días y ya marqué la película como pendiente pero ahora es cuando te lo digo.
Adoro tus vídeos, son fantásticos.
Olvidé decirte que me encanta el nuevo diseño. :-)
ResponderEliminarTengo muchísimas ganas de ver esta película desde mucho antes de que se estrenara aquí, pero me estoy aguantando porque sé que algún día la pondrán en la filmoteca, que es el único cine en VOS de por aquí, claro que no estrena a la par que el resto del cine y por ello es más barato, pero a veces merece la pena. La semana pasada ví Selma, Pride estará al caer.
ResponderEliminarEres lo más cuqui del mundo, que lo sepas.
besotes.
Selma la vi semanas antes que Pride también en el cine de mi universidad y también es genial.
EliminarHola!
ResponderEliminarEs una pena que no se proyecte la película en más cines. Mi hermana y yo estábamos deseando verla pero no la ponen en ningún cine cercano así que nos quedamos con las ganas de ver esta película en pantalla grande. La veremos próximamente en casa, con un grupo de amigos, que no es lo mismo que en el cine pero también está bien jaja.
Un beso!
El viernes me acordé de ti.
ResponderEliminarComo cada año desde hace bastante tiempo, fui a la inauguración de la Mostra de Cine Llatinoamericà de Catalunya que hacen aquí en Lleida desde hace 21 años y, tras la entrega de premios, siempre ponen una película. Este año pusieron el Libertador —muy buena, por cierto— y al terminar la película, nos pusimos a aplaudir. Ergo, me acordé de ti jeje
Fin de la anécdota. Ahora al tema de la entrada: tengo esta película muy arriba en mi lista de "pelis para ver asap" gracias a verte hablar tanto de ella. Además, como dices, los británicos saben hacer comedia como nadie por lo que estoy segura que no me decepcionará.
¡Un abrazo!
ps: ¿se nota que me estoy poniendo al día con todos los blogs que tenía por leer? ^_^
Me parece una alternativa muy buena.
ResponderEliminarYo últimamente estaba ya aburrida de ver anunciar las tipicas películas comerciales que no me llaman nada. Después descubres cosas como esta y te vuelves a enamorar del cine.
Como siempre, genial leerte. Me encanta tu blog.
Por cierto te he nominado a un premio blogg, si te interesa pasate.
Un abrazo, nos leemos =)
¡Hola! La verdad es que la sinopsis de la película es super interesante y tiene una pinta genial. Cotillearemos un poco por el cine haber si está disponible para pasar un bonito rato.
ResponderEliminarUn beso!
Melani y Beatris