“Hoy los alemanes eran odiados. Ayer, los amaban. ¿Qué pasaría mañana?
Ayer, Tatiana había conocido a Alexandr.”
Ayer, Tatiana había conocido a Alexandr.”
Sé que lo normal es esperar un tiempo -unas horas o incluso unos días- para escribir la reseña después de haber terminado un libro, pero como ya hice con La estrella, escribo estas primeras líneas tras escasos minutos de haber cerrado El jinete de bronce. No sé cómo saldrá la reseña, porque realmente no tengo ni idea de qué decir. Quiero agradecerle a Marie April el haberme descubierto esta historia tan inolvidable y que tantas cosas me ha hecho sentir y a Cris por regalármela en el Amigo Invisible que organizamos para las Navidades Blogueras.
Leningrado, 1941: la guerra parece lejana en esta ciudad de antigua grandeza, donde dos hermanas, Tatiana y Dasha Metanov, comparten un minúsculo apartamento con su familia. La vida bajo el gobierno de Stalin es dura, pero las privaciones que les esperan ni siquiera son imaginables: el ejército de Hitler está a punto de invadir su querida patria.Bajo el terror y la dificultad, se esconden la belleza y la esperanza: Tatiana ha conocido a Alexandr, un joven oficial del Ejército Rojo de misterioso y turbulento pasado. Mientras el ejército alemán y el duro invierno cercan la ciudad, los amantes se ven abocados a un amor imposible que puede desgarrar la familia de Tatiana y ser, para Alexandr, tan destructivo como la guerra. Y, mientras tanto, la corriente de la Historia arrasa a su paso el mundo tal y como ellos lo han conocido y amenaza con cambiarlos para siempre.
Antes de empezar, quiero dejar claro que no puedo ser objetiva con la reseña de esta novela. He amado cada página, cada capítulo y cada personaje. Paullina Simons ha creado una obra redonda que derrocha vida, realismo y amor. Ha entrado de lleno en mi lista de libros favoritos y muero por ver publicada su segunda y tercera parte en bolsillo (porque están descatalogados, para seguir con mi mala suerte característica).
Los personajes están tan vivos y tienen tanta personalidad que casi saltan de las páginas. La inocencia que Tatiana tiene al principio de la historia se va convirtiendo en madurez a lo largo de la misma. La guerra y sus consecuencias la hacen madurar en muchos aspectos, aunque realmente sigue conservando su punto ingenuo que tanto la caracteriza. Alexandr, por lo contrario, es fuerte y seguro; sabe lo que es la guerra y en lo que puede acabar, y vive con ello día a día. Pero saber que puede morir en el frente lo lleva a provechar cada momento que pasa con Tatiana, regalándonos momentos inolvidables que llegaron a ponerme, literalmente, los pelos de punta. Los otros personajes también son importantes en el desarrollo de la historia, pero la verdad es que no hay muchas historias secundarias, y las que hay están estrechamente vinculadas con la relación entre Alexandr y Tatiana.
“—Respóndeme.
—¡Por mucho que chille y patalee, Tatiana, pero en el mundo libre, Tatiana! —Alexandr se bajó del mostrador—. ¡No por mucho que chille y patalee en la esclavitud! Es una diferencia vital, esencial, crucial. Es la diferencia entre morir por Hitler y morir por detenerlo.
—Pero no deja de ser morir, ¿verdad, Shura? —Tatiana se le acercó—. No deja de ser morir.”
La ambientación no podría ser más perfecta. Las palabras de Simons me trasladaron a 1941 y sentí que paseaba por el Jardin de Verano y por las calles de Leningrado junto a Tatiana y Alexandr. El horror de la guerra deja su huella hacia la mitad de la novela, sin dar tregua ni un momento: lo Segunda Guerra Mundial no fue piadosa con nadie, y eso queda plasmado perfectamente en la historia y en sus personajes. El invierno helado sin casi comida para subsistir, los bombardeos, las evacuaciones… Todo entremezclado con una historia que no deja indiferente.
“—Algún día —dijo Alexandr, mientras la cogía en brazos—, tendrás que explicarme por qué tomaste el autobús número 126 y cruzaste Leningrado hasta la terminal.
—Algún día —manifestó Tatiana—, tendrás que explicarme por qué me seguiste.”
Y entre todo el horror de la guerra, la historia de amor más preciosa que he leído nunca. He leído bastantes novelas románticas, pero ninguna de sus historias ha sido tan arrolladora y me ha mantenido tan enganchada a sus páginas como El jinete de bronce. La historia de amor se va gestando poco a poco, se conocen, hablan, hablan, pasean, hablan y se enamoran. Sencillamente precioso.
Una de las críticas que aparecen en la parte de atrás de la edición de bolsillo reza “Extraordinaria… Tanto como Lo que el viento se llevó.”. Yo no he leído ésta última, pero puedo afirmar que, con el tiempo, acabará convirtiéndose en un clásico de la literatura romántica histórica. Tiene todos los ingredientes para hacerlo y espero que así sea… Y también espero que la editorial DEBOLSILLO se anime a publicar la segunda y tercera parte, o tendréis que venir a recoger los restos tristes de Andvari que quedarán por el suelo.
“Tatiana estaba a punto de quedarse dormida cuando comprendió que la asustaba menos lo intangible de la guerra que lo tangible de la desilusión.”
Hace tiempo que tengo ganas de leerla pero después de leer tu reseña no sé si la dejaré mucho más tiempo pendiente, me ha encantado!
ResponderEliminarbesos
DEBO leer este libro. *___* Tu reseña ha sido tan efectiva como si la hubieses llenado de corazones.
ResponderEliminarPues me apunto el título, porque con lo que cuentas, habrá que leer la novela si o sí.
ResponderEliminarUn abrazo ;)
Ahora es casi imperdonable no leerla, genia de reseña.
ResponderEliminarBesos!!
Vale, si ya le tenía ganas después de leer la sinopsis, con tu reseña y las citas que has puesto has conseguido que me ponga a soltar improperios por vivir lejos de una librería.
ResponderEliminarAnyway, me lo apunto y en cuanto pueda me lo compraré, que me encantan los libros ambientados en esa época, y sobre todo las historias de amor.
¡Gracias por la reseña!
Muaaks!
Preciosa reseña para un libro magnífico que no se merece menos.
ResponderEliminarPara mí ha sido un verdadero placer habértelo recomendado y que te haya llegado tan hondo. Es una lectura obligada, creo que será una de esas trilogías que leeré a lo largo de toda mi vida.
Besos y un achuchón.
Tengo muchísimas ganas de leer este libro, me ha hablado mucha gente bien de él. Creo que después de leer esta reseña ya definitivamente me tengo que hacer con él.
ResponderEliminar¡Un besito!
ooohh que reseña tan maravillosaa!!!!! Yo leí los libros hace unos cuantos años y los he releído mil veces y cada vez descubro algo nuevo, y sigo sintiendo tantísimas cosas como la primera vez.
ResponderEliminarEsta novela hay que leerla si o si ^^
Un besote :D
Oí hablar de este libro por Marie April, y de su boca escuché auténticas maravillas.Aún no me lo he comprado porque sé que es una trilogía y es casi imposible conseguir los otros dos. Pero no tengo fuerza de voluntad y seguro que cae pronto :)
ResponderEliminarEste libro no lo conocía muy bien pero ahora me llama un montón n.n
ResponderEliminarBesos!
Guapetona, ha sido una reseña apasionada de verdad ;o). Leí otra hace algún tiempo y coincidía con la tuya. Que es una novela maravillosa. Ojalá traigan las demás partes como tú dices.
ResponderEliminarBesotes con recogedor preparado.
Entre Marie April y tú (con todo lo que me comentaste ayer) tengo que leerlo sí o sí. Te ha quedado una reseña preciosa y que deja con ganas de leerlo ya.
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