Let's Talk es una sección semanal que nació en el blog I swim for oceans. Su administradora, basándose en un tema por semana, lanza una pregunta para que nosotros y ella misma la respondamos. ¡Es un debate! Puede apuntarse quien quiera, pero siempre dando créditos. Aquí, en Palabras como souvenir, he decidido dejar el mismo título de sección por respeto al original y seguiré el orden de temas de la autora.
Pregunta: ¿Prefieres los libros en tus estanterías o en formato digital, y por qué?
Intentaré ser breve y concisa en este Let's Talk, porque no quiero extenderme demasiado y acabar liándome a mí misma con mis propios argumentos. Así que simplemente os diré mi opinión -basada en mi experiencia- y vosotros podréis darme vuestra propia opinión. Sólo espero que no juzguéis mis argumentos, porque de verdad que éste es un tema un poco complicado para mí.
Antes de empezar, voy a responder a la pregunta. Me quedo con los libros en papel, en formato físico, a los que pueda manosear, doblar páginas para marcar mis partes preferidas y que ocupen un lugar descomunal en mis estanterías o en mi bolso. Intenté leer un libro en formato digital y dejadme que os diga que fue una experiencia un poco fría. No tenía la sensación de estar leyendo un libro. Sí, sé que lo que importa es la historia y no el formato, pero es un tema que para mí es importante.
¿Que los E-Books tienen ventajas? Por supuesto que las tienen. Es más cómodo (no tienes que llevar el libro encima y, por supuesto, te ahorras espacio) y barato. Sí, lo sé. Pero sigue sin gustarme. Para mí leer un libro no es sólo ponerme delante de las letras y palabras y leer. No, para mí todo empieza en la librería, donde suelo pasar horas y horas entre sus estantes, buscando portadas que me llamen la atención, títulos que hagan que quiera zamparme el libro allí mismo o simplemente acariciando los lomos de aquellas historias escondidas entre dos solapas. Para mí es mucho más, y todo eso se pierde en el momento en el que metes un libro en un lector electrónico. Lo siento, pero no.
Además, no me negaréis que desde la llegada de los E-Books la piratería es algo muchísimo más fácil de llevar a cabo. No me malinterpretéis, soy la primera que se queja de los precios excesivos que las editoriales españolas se empeñan en poner a los libros actualmente, pero hay otras maneras. Leer las versiones originales suele ser muchísimo más barato, pero si no sabes inglés siempre queda la opción de comprar el E-Book. Pero claro, descargarlo gratis es más fácil, y ahí empieza todo. Así empezó en la música y así empezó en el cine. Y es algo triste, muy triste, tanto para los productores de cultura como para sus consumidores.
Así que... Me quedo con el libro de toda la vida, con sus hojas que se van poniendo amarillas con los años y que puedes prestar a cualquier amigo o conocido bajo el grito de ¡como lo dobles te mato! Ésta ha sido mi opinión, y me gustaría saber la vuestra sobre el tema. ¡Nos vemos el próximo lunes con un nuevo Let's Talk! :D